
En el arranque de la semana, los bonos argentinos se recuperan luego de varios días de retroceso. Con un leve repunte de 0,5% en promedio, el riesgo país cede a 639 puntos básicos.

El pasado viernes, el indicador de JP Morgan que mide la sobretasa que debería enfrentar Argentina si saliera a los mercados, se ubicaba en 651 puntos básicos. Así se empezaba a alejar de los 599 puntos que había tocado hace dos semanas, el menor nivel desde enero de este año.
La semana pasada, los activos argentinos se vieron golpeados por la incertidumbre global en los mercados, empujada por el temor a una burbuja tecnológica y los datos preocupantes sobre la evolución de la economía de Estados Unidos. Así, el viernes pasado los bonos argentinos llegaron a bajar 1%.
Pese al resbalón de la semana pasada, los bonos acumulan en promedio un alza del 3,5% en el mes y se perfilan a cerrar el año con una mejora en torno al 8%.
Este lunes, el índice Dow Jones sube 0,3% en Wall Street, el Nasdaq, que engloba a las tecnológicas se recupera 1,8% y el S&P sube 1%. Sin embargo esto no alcanza para que los ADR argentinos levanten cabeza: casi todo el panel de las acciones argentinas en Nueva York está en rojo, con Macro e YPF con pérdidas del 3%.
A diferencia de los bonos, las acciones siguen con números negativos en lo que va de noviembre. Esta semana el mercado estará atento a la presentación de los resultados de los bancos, que mostrarían números flojos impactados por el aumento de la morosidad en en el pago de créditos y tarjetas.
El otro foco de atención estará este miércoles en la licitación que realizará el Central y en la evolución de las tasas, luego de algunas medidas anunciadas el jueves pasado para aflojar el «apretón monetario».
Los títulos públicos recibieron un empujón tras la victoria electoral de Javier Milei el 26 de octubre, después de haber transitado varios meses de caídas, lo que llevó al riesgo país a tocar los 1.440 puntos hace dos meses.
El apoyo del gobierno de Donald Trump a la gestión de Javier Milei, con la intervención del secretario del Tesoro Scott Bessent para frenar el alza del dólar, mejoró las chances electorales y el resultado del 26 de octubre cambió el humor del mercado en favor de Argentina.
Junto con eso llegó la ratificación de hecho Luis Caputo al frente del Palacio de Hacienda y se alejaron las chances de una devaluación los que llevó al dólar al actual escenario de calma cambiaria.
La deuda que viene
Para el Gobierno la baja del riesgo país es decisiva para poder volver a endeudarse en los mercados internacionales. Para cruzar ese umbral, es necesario que el riesgo país se consolide debajo de los 500 puntos. Hasta ahora, el regreso a la zona de los 600 puntos permitió que varias empresas argentinas salieran a colocar deuda y lo mismo hizo la semana pasada la Ciudad de Buenos Aires, que consiguió endeudarse a una tasa de 7,8%.
La semana pasada, el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, sostuvo que la estrategia del gobierno para pagar los vencimientos del 2026 – que llegan a US$ 18.000 millones- pasará por el regreso a los mercados en lugar de hacerlo vía compra de dólares.
“Si el Tesoro recupera acceso al mercado de capitales el Banco Central dejará de proveer las reservas para afrontar los pagos y la remonetización de la economía se reflejará directamente en la acumulación de reservas internacionales”. Y advirtió: “No debemos forzar el ritmo de esa acumulación que será definido por el proceso de remonetización y no al revés».
Hoy las reservas del Banco Central son negativas en US$ 11.000 millones, prácticamente el mismo nivel que existía al comienzo de la gestión de Milei. Si bien la recomposición de reservas es uno de los compromisos asumidos en el acuerdo con el Fondo Monetario, tras la aparición de Estados Unidos con un swap por US$ 20.000 millones, la estabilización del dólar y la victoria electoral, el equipo económico insiste en apostar por la vía del endeudamiento antes que salir a comprar dólares masivamente, para evitar que suba el tipo de cambio y esto impacte sobre la inflación, el principal capital electoral de Milei.
